Un regalo maravilloso para Navidad… Escapada Rural a Potes.
Últimamente se ha puesto de moda eso de sorprender con Paquetes Regalo. Compañías como La Vida es Bella o SmartBox son marcas líderes en la venta de este tipo de cajas en cuyo interior se encuentran vales regalo para experiencias como Conducir un Ferrari, Masajes en Spá o Escapadas Románticas como la que nos regalaron a mi pareja y a mí en navidad. El paquete se llama Refugio para Dos de la marca La Vida es Bella. Contiene un librito con más de 200 rincones con Encanto en toda España para disfrutar de una noche de alojamiento y desayuno para 2 personas. Nosotros nos centramos en la provincia de Cantabria e hicimos una lista con las que más nos gustaron. La Posada de Santa Ana en Suances, Posada la Tebaida en Vega de VillaFufre o Casa Fidela en Lomeña, entre otros.
Finalmente nos decantamos por ir a la zona de Liébana, donde se encontraba la casa rural Casa Fidela.
Salimos el sábado día 2 de Junio dispuestos a pasar la noche del sábado y del domingo para regresar a Bilbao el lunes. Según las indicaciones de googleMaps cogimos desde Bilbao la autovía dirección Santander, Torrelavega, Cabezón de la Sal, Unquera, Poblado de Ojedo hasta llegar al Barrio de Lomeña. Es curiosa la carretera que hay que tomar pasando el pueblo de Panes. Se llega a La Hermida, por donde transcurre una angosta carretera entre altísimas montañas llamada el Desfiladero de la Hermida. El paisaje es espectacular para todo aquel que le guste conducir y esté dispuesto a pasar unos 30 minutos al volante en una carretera con multitud de curvas. Una pena que lloviera, dejamos las fotografías para el camino de vuelta. Sin duda, una de las carreteras y paisajes más bonitos de la zona.
El Barrio de Lomeña está en un alto. Hay que estar bien atentos a los indicadores de la carretera nacional CA-184 para girar a la izquierda y comenzar a subir por unas altas pendientes. Llegamos a las 19.45h a Casa Fidela, 2h45min exactos desde Bilbao. La casa está situado en un barrio bastante tranquilo y apartado, donde sólo hay casas, ninguna tienda.
Casa Fidela cuenta con una especie de parking privado para uso de sus clientes. Una idea genial, ya que si no no habría hueco para aparcar todos los coches que llegan. La casa está recién reformada y muy gustosamente decorada. Cuenta con 3 plantas. En la planta baja la cocina, comedor y bar. Planta primera la recepción, una salita común con sofás y televisión y algunas habitaciones. En la segunda planta 5 habitaciones más. Nuestra habitación, la número 7 estaba en esta última planta.
Una pequeña habitación con baño. Muy confortable. Suficiente para el tiempo que pasamos en la casa. Con la tarjeta regalo una cesta de frutas de temporada con frutos secos de la zona, nueces y avellanas. Cuando llegamos no había nada y se lo recordé a la chica. Muy simpática nos dejó en la habitación esta cestita. Que no pudimos probar ni una nuez, no teníamos con qué partir!
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