A 25 kilómetros de Nápoles, por carretera o a bordo del tren Circumvesuviano, Pompeya muestra el devastador poder del Volcán.
Andar por sus hrees un impagable viaje por el tiempo, un medio único de asomarse a la vida cotidiana de la Antigüedad: el teatro, las termas, la basílica, los templos, todo perdura en un estado excelente. El alud de lava y cenizas que sepultó la ciudad romana en el año 79 d.C. la protegió de la erosión hasta su descubrimiento arqueológico en 1750.
Abandonamos Nápoles con intención de pasar unos días en Salerno. Pero antes, queremos hacer una parada y realizar una visita a Pompeya por libre.
Otra opción, muy recomendable, es la de visitar con un tour en grupo reducido con un arqueólogo.
Nosotros hemos alquilado un coche para 5 días, que nos pareció nos iba a dar más libertad para movernos y explorar la Costa Amalfitana. Desde Nápoles tardamos unos 30 minutos en llegar a Pompeya. Aparcamos el coche en un parking de un restaurante por 3€/hora. Tuvimos que dejarle la llave del coche, porque para aprovechar mejor el espacio, colocan los coches uno junto al otro formando un tetris. Si al final del día decidimos comer ahí, el estacionamiento sale gratis (pero con el hachazo que nos metieron, no creo que merezca la pena…).
Qué ver en Pompeya
La visita al yacimiento arqueológico de Pompeya es un imprescindible en cualquier viaje a Nápoles y al sur de Italia. Desde que fuera sepultada por la erupción del Vesubio, han salido a la luz dos terceras partes de lo que fue la ciudad en el siglo I, innumerables riquezas que convierten a Pompeya en el sitio arqueológico más famoso del mundo.
Nos plantamos en la entrada de Piazza Esedra a las 11.30h. Tenemos entre 30 y 45 minutos de cola. Existen tres entradas: la que queda más cerca de la estación de tren y se considera entrada principal es la Entrada de la Marina, que tiene la mayor parte de la espera bajo la sombra. Además, es en esta entrada donde se compran las audio guías. No hay taquilla de alquiler en todas las entradas. El precio es de 6,00€ por audio guía, más 13,00€ de la entrada al recinto. Muy cerca encontramos la entrada de la Piazza Esedra, por la que accedimos nosotros. Existe una entrada alternativa que es la puerta de la plaza del Anfiteatro, situada al sureste del recinto, a la cual se accede desde el centro urbano del actual pueblo de Pompeya, a donde llegan los trenes de líneas regionales y nacionales.
A partir del mediodía la cola comienza a decrecer y para las 14,30h, que es cuando salimos, ya no había nadie esperando.
- Precio: 13€ adultos / 7.50€ reducida y estudiantes entre 18-15
- Descarga mapa: www.pompeiisites.org
Las ruinas arqueológicas de Pompeya ocupan una extensión de 66 hectáreas. La visita requiere unas cuantas horas para poder recorrer las calles, imaginar el ambiente y entrar en las casas. Leemos en internet que es muy probable que no nos dé tiempo a abarcar toda la zona, así que marcamos en el mapa los sitios que más nos interesan visitar, basándonos en diferentes blogs que hemos leído y de la guía que llevamos.
Hacemos nuestra primera parada en el Teatro Grande y Teatro Piccolo.
Salimos por la Via dei Teatri que nos lleva a una de las avenidas principales, Via dell’Abbonanza. Entramos a visitar las Termas Stabiones, las termas son las mejores conservadas en Pompeya. En la sociedad romana, en las termas no sólo se podían tomar baños fríos o calientes o practicar ejercicios deportivos, se trataba también, y sobre todo, de un lugar de encuentro
Desde aquí, ponemos rumbo al punto más alejado del recinto, el Anfiteatro donde tenían lugar las peleas de gladiadores y fieras. Junto a ellos encontramos los baños y un punto de información. Seguimos la ruta visitando el Huerto de los Fugitivos, donde encontramos 12 calcos que reproducen a personas sepultadas bajo las cenicas? del Vesubio.
Continuamos visitando el Lupanar, uno de los prostíbulos mejor conservador de Pompeya. Contiene diez pequeñas habitaciones, en las que a la entrada se pueden observar pequeños paneles eróticos.
Y terminamos en el Gran Foro donde encontramos una maravillosa estampa del volcán al fondo que observa imponente Pompeya. Se trata de una extensión abierta y rectangular que era el centro de la vida pública de la ciudad. Hoy en día un buen número de columnas todavía se levantan. En el foro está ubicado también el Templo de Apolo y numerosas estatuas y columnas.
Como zonas recomendadas que no llegamos a visitar nos queda la Casa del Fauno, se trata de una enorme residencia con diferentes salas bellamente decoradas y bien conservadas. En su interior destaca una fascinante estatua de bronce, muy pequeña, de un fauno que baila.
Tras 3 horas de caminata bajo el sol, damos por finalizada la ruta arqueológica y salimos a comer.
Vamos directos al restaurante donde tenemos aparcado el coche. Tomamos 1 ensalada para compartir, 4 refrescos y 4 platos de pasta, en total 102e. Una locura, pues sin ninguna duda la comida no lo merece.
Otras visitas recomendadas:
- Herculano, A escasos 15 kilómetros de Pompeya se halla Hercuolan, la hermana menor en lo que a importancia para los historiadores se refiere, pero capaz todavía de dejar boquiabierto a los visitantes por su magnífica conservación.
- El Vesubio. Por su silueta gris no deja de ser inquietante y no podemos alejar de nuestra mente la idea de que, aunque el volcán está dormido en la actualidad, no lo estará eternamente. Es posible visitar durante todo el año.
Nuestra jornada turística finaliza y ponemos rumbo a Salerno donde montaremos nuestro campamento base para seguir vitando la Costa Amalfiatana.
Dónde dormir
Hemos elegido el Grand Hotel Salerno para alojarnos 5 noches y visitar la Costa Amalfitana. Lo primero que nos piden es que abonemos las tasas de la ciudad, que son 3€ por persona y día. En el resto de hoteles siempre hemos abonado esta tasa al abandona la estancia, por lo que nos resulta un poco extraño. El hotel para ser un 4 estrellas, se le puede caer alguna perfectamente. Las habitaciones son amplias, pero para mi gusto no de su categoría. El hotel dispone de un buffet de desayuno muy completo y una preciosa terraza panorámica en la planta 5. No está céntrico, pero sí muy cerca de la playa y del paseo, en una zona muy agradable.
En todo Salerno hay que pagar por estacionar el coche. El hotel tiene un parking privado cubierto que cuesta 18€/día.
Páginas de Interés:
- www.viajaporlibre.com/blog/italia-el-temido-volcan-vesubio/
- www.audioviator.com/es/Audioguia-Napoles-La-vida-romana-de-Pompeya
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HOLA MUY ÚTIL TUS COMENTARIOS. MUCHAS GRACIAS.